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“Peruanísimos cien por ciento” (Bata, 1972)
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Que curioso, por lo visto eso de promocionar nuestros platos no es reciente con esto de los Gastón, Don Cucho, Osterling sino que data desde el gobierno militar…que loco el diseño fácil se podrian volver a vender estas alpargatas con nuesros platos…y eso que Bata es una marca transnacional (checo-canadiense)
Bueno aunque Bata perú no era tan transnacional era como una franquicia, los calzados los fabricaba la fenecida Fábrica Peruana de Calzado Peruano
Ya habían escapado de mi memoria los recuerdos de esas zapatillas (creo que mi hermana tuvo un par) con esas inscripciones graciosas de platillos y potajes de nuestro acervo culinario.
Bata Rímac, ¿no?
Cuanto tiempo!
GH
Trae recuerdos , pero honestamente esas zapatillas son un soberano golpe bajo al buen gusto.
Y se deshilachaban con solo una caminada…eran “mirame y no me toques”…..consuma lo que el peru produce!
No sé si comerme los zapatos o calzarme los anticuchos….
De acuerdo con el Sr. Broncano… feizmente no tengo recuerdo de estos esperpentos 🙂
Sinceramente no me acuerdo de estas zapatillas,pero que tal huachaferia a la peruana no.
Si, el gusto era recontratorreja…
GH
UNA CACHETADA AL BUEN GUSTO!
Pues si nadie se acuerda debe ser porque nadie las usó.
Y esa publicidad es otra cachetada al buen gusto ¿zapatillas encima de la comida?¿A quién se le puede ocurrir?
No puedo creer que alguien haya tenido esta idea para hacer zapatillas, es lo peor que he visto. Al lado de esto, las zapatillas Audaz eran Nike sobre medida.
Antes, a finales 69- verano 1970 salieron las “Tabazinhas”..con su modelo exclusivo “Mocoto” …aferrandose a todas los articulos que se vendian por la euforia de la clasificacion de Peru a la Copa, donde el brasilero Didi era el abanderado promocionando cosas bautizadas en portugues o portunol , para crear la auroara de ‘exclusividad’ o de ser ‘importados’ (ejemplo …galletas, las Cariocas Didi, camisetas tipo buzo de manga larga de baja calidad, detergente ACE ,venta de gaseosas, etc)
Hola. Me parece un tanto injusto aquellos comentarios que califican de “esperpentos” o monumentos al mal gusto a los productos del pasado. Me parece también que este blog asi como el sitio web de arkivperú siempre se caracterizó por mostrar para evocar la nostalgia de un pasado que efectivamente “ya no volverá”. Y ese era el leit-motiv.
A lo que iba era que “esas cosas” representan recuerdos o la sustancia psicológica que reconstruyen emocionalmente nuestro pasado. Las decisiones respecto a los modelos, colores, tamaño, precio, etcétera, de los productos de aquel entonces representan en sí decisiones de una, quizás, incipiente mercadotecnia pero en todo caso, reflejo de nuentro mercado, de nuestra cultura e idiosincracia.
No obstante ello, muchas cosas que hoy veríamos como improbables de comercializar o mercadear, dada nuestra actual y evolutiva realidad de mercado, entonces eran plenas, disfrutables, adorables, geniales o simplemente importantes. De otra manera no se explica la nostalgia. Así pues lo productos de “primerísima calidad” o de “primer mundo” que hoy tenemos quizás hagan ver como “primates” a sus antecesores, pero solo estos últimos poseen ese halo emocional que difícilmente habrán de perder con el paso del tiempo. Por eso se preservan en la memoria.
Así, en ese contexto, nos reencontramos con juguetes, golosinas, zapatillas, ropa, peinados, canjes… una vasta gama no de cosas, sino de cápsulas de tiempo que al ingerirlas, nos regresionan, nos recuerdan cosas buenas y malas también. Tocan fibras y reexperimentamos sensaciones que creimos no volveríamos a sentirlas. Las creimos olvidadas. Podemos reir por un recuerdo grato: los amigos, los hermanos, la familia, el colegio, el barrio. Pero también podemos llorar porque en la infancia o la adolescencia no todo fue felicidad: hay cosas que perdimos. Reír y llorar por igual (en ambos casos es lo mismo). Quizás en silencio, en soledad donde nadie nos ve como volvemos a nacer. Alguien anónimo desde cerca o lejos nos abre una puerta que creimos ya cerrada. Esa es la dimensión de la nostalgia.
Por ello, y disculpen la extensión, esos calificativos que criticaba en un principio, que intentan burlarse o ningunear algunas cosas del pasado, a mi parecer, solo reflejan la ausencia de esa valía que muchas cosas de hoy carecen. Y quienes se empeñan en ese esfuerzo, creo que a su vez se burlan también irónicamente de su presente.
“Quien critica neciamente su pasado, no domina su presente. Por lógica, quien espera con ansias el futuro, no soporta tampoco su presente.”
Saludos
Bravo!!! Me encantan estas zapatillas!!! Son únicas!!! Me considero tener buen gusto y vivo en USA hace 27 años. Podré conseguirlas??? Donde???
P.D.: y para quienes no crean en ello, les recomiendo leer el poema de Bruno Mendizabal “Pinball Queen” de su obra “San Felipe Blues” (Lima. 2004):
“En el pinball
todo era normal
hasta que llegaste tú…” (sic)
Bata era de Checoslovaquia, el nombre era el de la familia dueña del negocio, pero cuando Checoslovaquia se convirtió en protectorado de la URSS los Bata mudaron la casa matriz al Canadá.
a mi me la idea me parece muy buena.
que las zapatillas son o no unos esperpentos es cuestion de gustos.
a mi me gustan. y me compraria una de ellas si estuvieran en el mercado.
buena por postear los afiches! que tiempos
Yo tenía entre siete y ocho años cuando aparecieron esas zapatillas (que se las compraron a mi hermana). No podíamos usar otras marcas que no fueran SinFin, Diamante, Dunlop y Bata (las importaciones estaban prohibidas y “teníamos” que consumir lo que el Perú producía.
Creo que muchas de mis colaboraciones y recuerdos evocan los lados nostálgicos de tiempos idos, no sé si mejores, pero la mayoría de esos entrañables. Creo que a muchos de ustedes les consta.
Y a pesar de eso sigo pensando que las zapatillas ilustradas eran bien torrejas. Y podemos seguir evocando y conversando.
GH
Doctor Upgrading,
Creo que cuando decimos que esas zapatillas eran (en terminos boxisticos) un gancho de derecha al buen gusto no estamos menoscabando en lo mas minimo lo que tu llamas la dimension de la nostalgia.
Igual que el amigo Gustavo soy un nostalgico incorregible, pero ni el ataque mas agudo de “saudade” va a hacer dejar de ver esos esperpentos como lo que son: un canto a la huachaferia.
Las zapatillas no eran feas, pero la calidad de algunos productos de las tiendas BATA RIMAC no lo eran.
Abundaban por todo Lima y mayormente cerca a mercados y en centros comerciales, lo que hoy hachafamente la gente llama MALLS…
Dan
http://www.tvnovelasperu.com
Recuerdan la cancion:
Quiero Tabasinhas!! quiero Mocotó!!!
Qué nostalgia…..